Para jugar a la madre se necesitan cartas de la baraja española según los jugadores, que como mínimo deben participar 5 jugadores. Al haber 5 jugadores se reparten 5 cartas, una carta a cada uno.
Antes de todo se escoge la madre a la que se le asigna la sota de oros, carta que pondrá boca Arriba encima de la mesa para que la identifiquen y se pone en un sitio donde vea a todos. Cuando esto este hecho se cogen de la baraja el as de oros y otras cartas entre el 2 y el 7, que a quien le toque será una persona normal; al contrario que al que le toque el as de oros que será el asesino, también el único que sabe quién es el asesino, obviamente.
Si todos tienen ya su carta y también la miraron sin que se la miren, la madre dice "que se duerma el pueblo y todos se cruzan de brazos, cierran los ojos y meten la cabeza entre el pecho y los brazos.
A la voz de "que se levante el asesino, el asesino se levanta, señala al que quiera que sea su víctima y se vuelve a dormir.
"Que se levante el pueblo", dice entonces la madre. El pueblo se levanta y la madre dice quién es el asesinado. Éste arroja su carta boca arriba sobre la mesa y entonces todos los jugadores entran en una discusión para ver quién fue el traidor mientras que la madre intenta defender al asesino.
El juego se acaba en el momento que los ciudadanos entren en razón de quién es el asesino.
El que gana es la gente si se produce el caso de que den con él, si no el asesino por no ser descubierto y la madre ni gana ni pierde, sólo intenta encubrir al asesino.
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